El nacimiento de Dan

Gracias a Críspula, mi gran amiga y consejera, me he decidido a abrir este blog, que hacía mucho tiempo que quería hacer. Mientras lo creaba tenía multitud de temas y temas de los que hablar y ahora mismo no sé dónde se han metido. Será que tengo muchas cosas en la cabeza, entre ellas, un amor que me devuelve la vida y me la quita al mismo tiempo.
Pero haré mención al título de ésta mi primera entrada. No quiere decir nada de mi nacimiento del utero materno, pero sí tiene algo que ver con mi madre.
Yo antes para todo el mundo era Dani (o el odioso Daniel). Pero conocí a los Trotamúsicos (próximo tema en mi blog) hace un año y pasé a ser Dan. Y con él un nuevo yo. Hasta ese momento yo tenía novia y me casaba este año 2007. Con Dan salí del armario, que ya era hora, y me convertí en un bisexual alegre de la vida, soltero y sin complicarme la vida. En mis próximas entradas comentaré más a fondo cada uno de estos asuntos.

Y a quien más le gusta meterse en mis asuntos es a mi madre. Cuando he llegado a mi casa esta noche estaba en la cama y no se podía dormir por algo mío. No me ha dicho el qué, pero cuando he llegado a mi ordenador he visto que sus gafas reposaban a su lado después de haber estado echando humo mientras leía mi correo electrónico, el cual yo me había dejado abierto antes de salir de casa. Iba por la segunda página cuando decidió que ya había leído y visto suficiente. Ha cometido una falta de respeto hacia mi intimidad y encima le tengo que pedir perdón yo por lo que se ha encontrado! Ha visto fotos (una en particular en la que me besaba con "el que no puede ser nombrado" y que preside esta entrada), ha visto los mails de mi chico, de mi mejor amigo Mofly, de mi otro amigo Manu y sólo se le ocurre preguntarme... "¿es que todos tus amigos son gays?" con una cara un tanto extraña. "No me importa, hijo, que seas gay, pero no me gusta la vida en la que te estás metiendo". ¡¡¡Como si fuera nuevo!!! Mofly siempre me dice que mis padres se pensarán que él me ha inducido en la vida gay, y va a ser que tiene razón (ultimamente se la doy mucho, que no se acostumbre, jeje). Mi madre continuaba con su paroleta: "he visto que le gustas a todos esos, y te tienen como a un tontín y te pasan de uno a otro, como si fueses su trofeo". ¡¡Si ella supiera lo tontín que es su hijo, que conoce lo que es la polla desde que tenía 14 años!! A mí nadie me trata de tonto, ni me pervierte, y eso le he intentado hacer ver, pero nada, su hijo es un santo y los demás unos demonios. Me dice que es perra vieja y que se entera de las cosas, pero luego me da a entender que estoy confundido y que debo volver con mi exprometida... muy claras no tiene que tener las cosas la perra vieja.
Ahora me llega un mail que me escribe desde la oficina. Lo único q hace es echarse las culpas como madre, me pide perdón por haber cotilleado, pero se excusa diciendo que está preocupada por mí. Sé que es verdad, pero no tiene ningún derecho a hacer lo que ha hecho. También me echa en cara que no tengo confianza con ella. No creo que aún estuviera yo preparado para contarle mi opción sexual a mi madre, no tiene nada que ver con la confianza.

En fín, algún día tendré que contarle que suelo ser yo el que lleva por caminos oscuros a los demás...