Bienvenidos al Paraíso

Ya se retrasaba este post, pero al final lo publico a tiempo (no como otros que supuestamente vendrán en el futuro y que son muuuuy pasados). No hace ni dos semanas que llegué de Fuerteventura, pero me parece que fue hace meses. Gracias a una oferta muy buena que salió en mi antiguo trabajo, y a Dani, que me llevó con él, pude disfrutar durante cinco días de este espectacular paraíso, como demuestro aquí en plan Baywatch.

Éstas eran las vistas desde nuestra maravillosa y enorme habitación.

Hicimos de todo, buceo en la piscina, tiro con carabina, horas y horas en la playita y beber y comer durante todo el día, ya que era un todo incluído, como en el Caribe (de ahí las pulseritas que llevamos). Era genial cada vez que tenías hambre o sed poder acceder a tantos manjares sin pagar de más. Eso sí, o era la tensión o la mala calidad del alcohol, pero durante el día iba demasiado sobrio para todo lo que ingería.

Por las noches nos uníamos en las cenas y en las copas con mi exsupervisora Mónica y su marido Javi, que son un encanto y que nos dejaron los pelos de punta con alguna anécdota de su Luna de Miel (soñé con esas avispas asesinas...). También un par de días después se nos unió Felipe, para aprovechar lo que quedaba (y bien que lo hizo, que casi cogió más color que nosotros!).

Y éstas eran las vistas desde la habitación de la parejita, mucho mejor que las nuestras, desde luego, pero tampoco nos quejamos, que teníamos mejor techo, jeje (vaaaale, es por decir algo, por supuesto que la suya era mejor!).

De la isla poco que decir. Que era marrón y blanca, con interminables carreteras y muchos molinos, pero tampoco me arriesgo a decir mucho, que no la visité, sólo nos quedábamos en el Resort, a disfrutar de la ventaja de no hacer nada más que comer y beber tumbado al sol.

Había infinidad de tíos buenos, hice muchas fotos (demasiadas, tanto que me apodaron como el Paparazzi Voyeur), pero como todos tenían pareja, estaban casados y algunos con hijos, no publico nada, que para eso yo respeto y pocas veces he publicado yo alguna foto sin el consentimiento al menos de hacerse la susodicha. Y eso, que todos heteros, de hecho cuando Dani y yo entrábamos al buffet, todas las cabezas se giraban y nos miraban como diciendo "mirad, aquí está la parejita gay". Era hasta gracioso.

Una noche en vez de irnos a dormir seguimos la fiesta en la playita, bien preparados que íbamos, con nuestra botella de champán y de JB, nuestras toallas y mantas y con las miles de estrellas que aquí nunca vemos, como esas fugaces que nos hicieron pedir deseos. E incluso llegamos al amanecer (muy temprano, sobre las 5.30) y que mucha gente del Resort también vio porque se pusieron sus despertadores para ver esta obra de la naturaleza que tanto merece la pena.

El toro mecánico fue genial, aunque sólo me apunté yo, y gané mi ronda acumulando más tiempo que mis competidores, por lo que me invitaron a una nueva ronda en la que aún duré más (y que me dejó una lesión en el muslo izquierdo durante una semana más, eso por hacerme el machote).

Según Mónica, Fuerteventura significa "Fuerte Viento" y le damos la razón porque fue un no parar. En la playita había multitud de búnqueres de piedras destinados a quitarte el aire mientras tomabas el sol. Eso sí, de tan poco aire que dejaban pasar a veces te mareabas. También eso nos ayudó a hacer algo de nudismo, que nunca viene mal. Y a parte de piedras también había ardillitas como ésta, tan monas. Cuando vimos la primera dijimos "ohhhh, pero que bonita!!". Unos segundos más tarde vimos como 40 moviéndose por las rocas y chillando, como si fueran ratas, por lo que decidimos que no íbamos a tomar el sol cerca de ellas.

Ya podemos decir que hemos inaugurado el verano, cuando en Madrid aún todo se veía gris, por lo que me doy un canto en los dientes por si ya no tengo playa el resto de los días estivales (y es que hay que empezar a trabajar de nuevo). Pero bueno, he disfrutado mucho, y aún me quedan las fiestas de Madrid, o del Orgullo LGTB, mejor dicho, y quién sabe si algún día me bajaré a mi querida Marbella... seguramente!

Y vosotros, qué tal habéis empezado vuestro verano?